21 febrero 2007

Carl Koller (1857-1944): Descubridor de la Anestesia Local

Por Dr. Samuel Barros R.

Jefe del Servicio de Anestesia y Pabellón del Hospital Clínico Fusat.

Chile

Las primeras referencias a la costumbre de algunos indígenas de América del Sur de mantener dentro de su boca las hojas de una planta llamada coca, pertenecen al Obispo del Cuzco, Vicente de Valverde (¿-1542), en carta al Emperador Carlos V en 1539, y a Pedro de la Gasca (1485-1567), Presidente de la Asamblea del Perú, en carta al Consejo de Indias en 1549.

La coca era una planta sagrada, regalo del dios sol (Inti). En la época pre-hispánica su uso era privilegio de la nobleza inca, y sólo después de la conquista española (1532) se generaliza en la población indígena.

El primer comentario en relación al efecto anestésico pertenece al jesuita español Bernabé Cobo (1582-1657), quien en 1653 escribe que el dolor de muelas puede aliviarse masticando hojas de coca.

La primera cantidad apropiada de hojas para iniciar los análisis químicos que permitieran descubrir el principio activo de la coca, llegó a Europa como resultado de la expedición de la fragata austriaca Novara, enviada en un viaje de investigación científica alrededor del mundo. En septiembre de 1859 Carl von Scherzer entrega al famoso químico, Wöhler las hojas, y éste designa para que haga el estudio a Niemann, quien en 1860 comunica el aislamiento de la cocaína.

La droga, utilizada casi como panacea, es ingrediente de jarabes y tónicos reconstituyentes, y mezclada con vino es utilizada por la realeza y los Papas.

El famoso psiquiatra vienés Sigmund Freud estudió los efectos médicos de la cocaína en los meses de abril y mayo de 1884 y publicó su artículo “Über Coca” en julio. Basado en sus investigaciones, Freud aconseja a su amigo Königstein usar la cocaína para aliviar el dolor en las patologías oculares.

Por razones que no están claras fue Carl Koller (1857-1944), otro oftalmólogo también al tanto de las investigaciones de Freud, quién decide experimentar con una solución de cocaína para lograr la anestesia ocular en animales, culminando el 11 de septiembre de 1884 con la primera operación realizada en un ser humano bajo el efecto anestésico local de la cocaína.

Se da como justificación la falta de recursos económicos para explicar el hecho que Koller le pidiera a Josef Brettauer, que presentara su comunicación en el Congreso de Oftalmólogos en Heidelberg, 4 días después (15 de septiembre). El impresionante desarrollo de la anestesia local y regional había empezado.

Carl Koller terminó de manera abrupta su brillante carrera en Viena, tras participar en un ilegal duelo con espadas, en el cual hirió a un colega que lo había insultado públicamente, debiendo por esta razón emigrar a USA.

En 1889 se incorporó al staff del Mount Sinai Hospital de Nueva York, ciudad donde murió en 1944 a los 86 años de edad, luego de una distinguida carrera en oftalmología.

Link al articulo original

Fuente: Ombrédanne

No hay comentarios.: